Hay personas que fueron mi inspiración, y hubo ciudades en las que la encontré, personas detonantes y ciudades explosivas o como prefieras llamarlo, las palabras llegaban contigo y tus ojos negros, y se iban por temporadas, al igual que tú; en un momento sentí el mismo miedo que siente un niño cuando le sueltas la mano y se pierde en un pasillo, tenía miedo de que cuando tú te fueras, lo que mas te gustaba de mi se fuera contigo, sorprendentemente después de noches sin dormir, calles oscuras que no recuerdo y días que prefiero olvidar, (de alguna u otra manera) te dejé ir dejando solo estas palabras de por medio, sin beso de despedida y sin decir adiós, solo una ausencia que pensé que duraría toda la vida. Pero el asunto no esta en quien vuela mas alto, si no en quien vuela a tu lado, no es quien agarra tu mano, pero si es quien te sonríe y no puedes sacar de tu cabeza, no es quien te dice la verdad y un par de cosas feas, es quien ademas de eso, puede mejorarlo con un simple gesto. A veces me pregunto, si no nos hubiésemos encontrado, ¿Te hubiese buscado? Como quien busca a quien cree que es su final, aquel amor de historia del que tanto hablaban, el que pase lo que pase no se apaga. Quiero que me sonrías una ultima vez y me digas que todo va a estar bien, pero tu ya no crees en destinos y yo sigo buscando ese concepto de amor, nuestros caminos no se encontrarán mas, al menos que alguna noche tu lo decidas, pero hasta entonces te estaré extrañando, es la verdad, y estaré esperando aunque nunca decidas regresar. 

Me sigo diciendo que no hay nada mejor que el ahora y que volveremos a brillar, que capaz cuando nos veamos a los ojos, dejaremos de buscarnos en otras personas y se irán estas ganas que tengo de estar en tus brazos y bajo tu mirada, que los días de gloria también volverán y que estaremos bien, mas que todo eso ultimo...

No te sueltes, estamos cerca.