Wednesday 4 December 2013



Al final no se trata de cuanto conoces a una persona ni con que tanta frecuencia han de hablar, importa es aquella huella que suelen dejar con tan solo apretarte la mano para saludar. Dicen que todo el mundo te marca de alguna u otra manera pero hay marcas que hacen que cambies tu mirar, y eso fue lo que paso.
Un dia conocí a una persona poco usual, de ojos grandes que te atrapaban por su simple magnetismo, te volvía prisionero de sus pensamientos pues común era lo que menos era, una mente que atraía y provocaba conocer, nadie la entendía pero ¿Quien en realidad podría? en un mundo tan básico, las mentes abstrusas son juzgadas ¡Y que mundo tan básico era el que la rodeaba! 
Tomando el bus, veo las luces, me asomo por la ventana y me pongo a pensar ¿Que es lo que ella piensa que tiene mal? Así como yo, quería huir, se sentía incomprendida y con una pesadumbre en los hombros ¿Será que no se da cuenta que la que esta mal no es ella? Repulsión a la ciudad sentía, no solo por la tarde pero también en la noche y en el día, me pregunto si es que por eso se escondía en aquella tienda al cruzar la esquina, aquella que solía visitar.

Describirla no seria sencillo pero si pienso en ella, pienso en "inspiración" no hay palabra mas simple ni definición mas compleja para categorizarla, pues esto es lo que causa y esto es lo que logra, esto es lo que tiene, esto es lo que ella es, un silencio tan ruidoso, pues rara vez hablaba, no hacia falta que dijera ni una sola palabra pues su sonrisa tímida lo decía todo, lo suficiente como para dudar una eternidad.
Algun día se irá, lejos, a algún lugar en el que si se pueda expresar, donde la gente se preocupe mas por lo que sentimos y pensamos y no tanto por lo que llevas en tu bolsillo, siento que algún día todos huiremos a donde nos sintamos aceptados, así como yo, ella también lo hará, se que olvidar no es una opción pero la tienda al cruzar extrañare visitar, ¿Algún día llegaremos a donde pertenecemos? Pienso que si.
Sigue, que aunque parezca, el camino no es infinito.

"La utopía esta en el horizonte.
Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos
Y el horizonte se corre diez pasos más allá 
¿Entonces para que sirve la utopía?
Para eso sirve, para caminar."
Eduardo Galeano

Monday 2 December 2013






¿Que pasa por mi cabeza?
¿Por la mía?
Bueno, es un poco difícil hablar sobre lo que pasa por mi cabeza, nunca ha sido fácil explicar el mar de pensamientos sin sentido, no se como navego en el todos los días, la razón por la que paso tanto tiempo en mi cabeza es porque no encuentro nada en la orilla que quiera agarrar o mejor dicho, no hay nada que logre agarrarme, nada me llena y ese es el problema. Vivo buscando esos segundos de euforia que debes sentir al entablar una conversación con alguien, tengo un sueño cada noche en el que huyo, eso es lo que desde hace tiempo he querido hacer, huir, sin maletas y sin nada, solo escapar a algún lugar lejano, bailar todas las noches por las calles, y quizás encontrar aquella buena conversación que tanto añoro, quizás encontrar-te- en algún lugar lleno de nostalgia, capaz ese es mi problema, te busco en cada extraño y cada cafe familiar que tomo, el invierno se acerca y se siente el frío  pero en esa sonrisa se siente calor, con cierto parecido al de una chimenea, ese calor que te hace sentir en casa y que todo esta bien, aunque no lo este.

El tiempo nunca esta de mi lado, pero del tuyo si, se que me quieres mas que a el, se que me encuentras en canciones y en libros, se que los días soleados te hablan de mi y se que me echas de menos. Yo te encuentro en mis letras, en cada una de ellas, letras llenas de melancolía y esperanza. Los días se vuelven interminables cuando pienso en tu regreso y en tu manera de bailar tan inusual y me pierdo pero quisiera perderme en serio, en tu voz.

Deseo huir, una vez mas, desaparecer y olvidar, dejar de contar la historia de lo que vi y lo que vivi, que mis pensamientos sean un día de primavera y no una tormenta.
Vuelve, tengamos una conversación, aun tengo ganas de huir, esta vez no para encontrarte, pero para que me acompañes y no ahogarme.


"Hoy quemé tu carta,
la única carta que me escribiste.
Y yo te he estado escribiendo
(sin que tu lo sepas) día tras día.
A veces con amor,
a veces con desolación,
a veces con rencor.
Tu carta la conozco de memoria:
catorce líneas, ochenta y ocho palabras,
diecinueve comas, once puntos seguidos,
diecisiete acentos ortográficos
y ni una sola verdad. "
- Jose Emilio Pacheco